«Fue un subidón ver que entraba en el Parlamento, por lo que significaba»

Desde que se hizo pública la lista de candidatos del PP para las elecciones autonómicas, Esther Merino Portugal -una maestra que iba en el número 20- se convirtió en un talismán. Si ella entraba en el Parlamento, Cantabria sería 'popular', así que su elección, que significaba la mayoría absoluta para Ignacio Diego, fue celebrada el domingo por todo lo alto. A ella se le nota absolutamente entusiasmada al otro lado del teléfono. Porque, además, se postulaba a alcaldesa de su pueblo, Cabezón de la Sal, y ganó por mayoría simple.

-¿Tenía alguna esperanza de resultar elegida o se sentía un simple relleno de lista y fue una sorpresa conseguir el escaño?

-Desde arriba (en el partido) siempre se habían puesto las miras en conseguir ese número 20 y, aunque lo lógico era tener dudas, mi objetivo, desde el primer momento, fue hacer lo posible por alcanzarlo. Creía que esta vez era posible. Soy consciente de que iba en un número estratégico, aunque lo veía posible, dentro de lo difícil.

-¿No le desanimaban las encuestas que dejaban la cifra de diputados del PP en 17 ó 18 nombres?

-No, no. Yo tenía confianza plena en que 19 eran seguros. Confianza plena. La cuestión estaba, justamente, en el 20. Pero la verdad es que no me creía las encuestas que nos ponían lejos del 20.

-¿En qué momento del domingo fue consciente de que se había conseguido la mayoría absoluta por la que suspiraba el PP?.

-Pues fue sobre las 21.30. Estábamos en la sede viendo por televisión los resultados y dijeron que ya teníamos el 20. ¡Fue un subidón¡ Pero enseguida vimos que sólo era con el 40% del escrutinio... y otra vez a esperar. A las 22.30 ya éramos totalmente conscientes y fue increíble. Conseguir el escaño 20 no era sólo que yo entrara de diputada. Eran más cosas al tiempo. La mayoría absoluta (que hacía 23 años que no se conseguía), el vuelco político que da la región, lo importante que es que el PP se haya convertido en la lista más votada en tantos ayuntamientos. ..Ya digo, ¡muchas cosas juntas¡

-¿La noche del domingo fue una de las más felices de su vida?

-Sí, sí, muy feliz. Una de las más, desde luego, junto con las del nacimiento de mis hijos.

-¿No le hubiera gustado más que ser diputada alcanzar la mayoría absoluta en su municipio y estar hablando ya hoy como alcaldesa electa?

-La Alcaldía me importa muchísimo también y voy a luchar por ella, porque aquí hemos ganado las elecciones.

-¿Qué pasará si, finalmente, consigue la Alcaldía? ¿Hará compatibles las funciones de alcaldesa con las de diputada?

-Quiero hacer compatibles los dos cargos. Primero, porque tengo un compromiso con los vecinos de Cabezón de la Sal. Pero también porque me parece muy interesante para Cabezón y toda la comarca mantenerme como parlamentaria: hacía muchísimos años que no había un diputado de este municipio. Ambrosio Calzada fue el último y creo que desde el Parlamento se pueden hacer muchas cosas por una zona como ésta.

-Como representante autonómica, ¿en qué áreas le gustaría trabajar? ¿Qué cree que aporta?

-Me gustan bastante los temas de educación y todo lo que tiene que ver con el empleo y juventud, por la experiencia profesional que tengo. En esas dos áreas me creo capaz de aportar ideas.

-Se han adelantado ya algunos nombres del que puede ser futuro gobierno del PP. Parece que Sáenz de Buruaga sería vicepresidenta y consejera de Sanidad, Cristina Mazas iría a Economía, Rodríguez Argüeso a Obras Públicas y José Antonio Cagigas a Educación... ¿cómo lo ve?

-Pues lo veo muy bien. Todas son personas que ya han demostrado su valía y conocimientos en los sitios en los que han trabajado. Tienen experiencia... Estoy muy de acuerdo con el planteamiento.

-¿Qué situación de la región le parece más urgente arreglar?

-(muy rotunda) El empleo. Además, creo que gran parte del respaldo que ha tenido Ignacio Diego se debe a que hemos sido capaces de llegar a la gente en este tema. Les hemos dicho que haciendo bien las cosas y gestionando de otra manera se crearía empleo y ahora hay que conseguirlo.

-Aproveche esta oportunidad para darle un consejo al nuevo presidente de Cantabria.

-Pues sería que no cambie, ahora que tiene que demostrar su capacidad. Pero él es un líder nato, así que el consejo es: que no cambie.