Las obras para mejorar la zona de Ontoria (Cabezón de la
Sal) que quedó afectada por las inundaciones que tuvieron lugar en
febrero pasado y que tanto se han hecho esperar están más cerca de
llevarse a cabo. El plan de emergencia propuesto por la Confederación
Hidrográfica del Cantábrico incluía, además de reconstruir la pasarela
que une Cabezón de la Sal y Mazcuerras, cuya estructura quedó seriamente
dañada tras las inundaciones, reparar los daños causados en Ontoria,
Villanueva de la Peña y a la altura de los molinos de Casar de Periedo.
Sin embargo, la pasarela se encuentra reconstruida desde
el pasado mes de octubre y del resto de las mejoras no se ha sabido nada
hasta hace tres semanas, cuando el director general de la Confederación
Hidrográfica del Cantábrico, Javier Rodríguez, visitó la zona del
Minchón, en Ontoria, con el fin de elaborar un proyecto y valorar la
cuantía de estas inversiones. «Lo que se pretende con este plan es
llevar a cabo las obras necesarias para retirar la piedra a las orillas
del río y deshacerse de los troncos y el ramaje que hay en la zona como
consecuencia de las inundaciones», explicó la alcaldesa de Cabezón de la
Sal, Esther Merino.
Una mejora que se ha hecho esperar casi un año y que los
vecinos vienen solicitando desde hace tiempo porque, a pesar de ver la
pasarela de nuevo en su sitio, la mayoría se pregunta cuándo se van a
realizar las actuaciones necesarias para que el agua no vuelva a comerse
el terreno.
Aunque la alcaldesa no ha hablado de medidas de
prevención, al menos sí parece que un año después de que el agua crease
serios desperfectos en diferentes zonas del municipio, algunas de éstas
volverán a estar limpias de ramajes y escombros si desde Confederación
acometen este proyecto.
Desde que el entorno del río Saja registrase importantes
deperfectos como resultado de las inundaciones del año pasado, desde
Confederación Hidrográfica del Cantábrico han llevado a cabo la
reparación de la pasarela que une Cabezón de la Sal y Mazcuerras. Para
ello, se ha construido una escollera a cada uno de los lados del río
para sujetar el puente a la tierra y se han instalado dos escotaduras
que frenan la velocidad del agua cuando el río baja con mucha crecida.
Con estas actuaciones, se pretende evitar que la
estructura se venga abajo de nuevo en caso de que vuelvan a producirse
las inundaciones.
Estas medidas se incluyen dentro del Plan de Emergencia
elaborado por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y el
Ayuntamiento de Cabezón de la Sal, que se dará por concluido cuando se
acometan el resto de trabajos con los que se mejorará el resto de zonas
afectadas por las inundaciones , como es el caso de Ontoria, ya que el
río se comió una buena parte del terreno que aún no ha sido recuperado.
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