Los usuarios de la piscina climatizada reclaman mejoras en las instalaciones

Usuarios de la piscina climatizada, responsables de la empresa que gestiona las instalaciones (Serviocio) y la alcaldesa de Cabezón de la Sal, Isabel Fernández, coinciden en señalar que estas dependencias no reúnen las condiciones adecuadas. Pese a conocer que estas instalaciones deportivas de Cabezón necesitan de manera urgente unas mejoras, usuarios como Raúl Fernández reconocen que el problema es que «llevamos así tres años y nadie hace nada por solucionarlo».

«Los sillines de las bicis están rotos, el suelo levantado y el agua de las duchas sale o fría o muy caliente», afirma Raúl, que lleva varios años de socio y padece diariamente las consecuencias de hacer deporte en unas instalaciones que no reúnen condiciones. Al parecer, la concesión de la piscina municipal tenía que haber salido hace dos años, «pero no ha sido así y los gestores (Serviocio) sólo se dedican a cobrar la cuota de cada persona y no se encargan de arreglar los constantes desperfectos», denuncian los usuarios.

Más usuarios

Como era de esperar, la única piscina climatizada que hay desde Torrelavega hasta Asturias se ha quedado pequeña. Cada vez hay más usuarios y la necesidad de unas obras de reforma se ha convertido en una necesidad apremiante. «Llevamos mucho tiempo enviando correos electrónicos al Ayuntamiento y al director de la empresa gestora, pero nunca recibimos respuesta», asegura Raúl. «Somos perfectamente conscientes de la situación, el problema es la burocracia y los trámites administrativo», señala el director de Serviocio, Jairo Fernández, al ser preguntado sobre el arreglo de las instalaciones. «Los proyectos de reforma deben ser aprobados y estas cosas siempre llevan tiempo», aseguró. En lo que se refiere al estado actual, el responsable de la empresa explica que «no se trata de llevar a cabo actuaciones a pequeña escala, sino que debemos arreglar el sistema de fontanería por completo ya que no es el adecuado para el gran uso que se hace de la piscina».

Fernández aseguró que los responsables de Serviocio son los primeros preocupados por dar una solución a esta situación, unas deficiencias que se registran desde hace tres años. «Hasta donde yo se, de septiembre quizá no pase la aprobación definitiva de la adjudicación de las obras de mejora ya que el proyecto se encuentra en su recta final», asegura.

«Muchos socios de la piscina piensan como yo y por eso hemos enviado quejas a la Concejalía de Deportes, a la alcaldesa y al propio director de Serviocio», señala con enojo Raúl Fernández quien destaca que en todos los casos la respuesta del director siempre ha sido la misma: «Para lo que pagamos, no podemos pedir más, pero yo pago lo que me piden y tengo derecho a recibir un servicio». Desde Serviocio achacan a la burocracia el retraso y afirman que «no se trata de un problema de dejadez de la empresa, sino de la lentitud de la burocracia».

Por su parte, la alcaldesa de Cabezón de la Sal, Isabel Fernández, apuntó que hasta el momento ella no había recibido ninguna queja aunque reconoce que «sí es cierto que el centro de está quedando pequeño». Fernández aseguró que «el interventor está trabajando en el tema desde hace días y lo vamos a llevar al próximo pleno».