Un hombre de 78 años estuvo circulando el jueves por la
tarde por la A-8 en dirección contraria durante 16 kilómetros, los que
separan Unquera de la salida de Caviedes. A lo largo de su recorrido
provocó que dos vehículos se salieran de la vía para evitar el impacto,
causando un accidente se saldó con daños materiales.
Fue sobre las cinco de la tarde cuando varios conductores
se cruzaron con este conductor en la autovía a la altura de Unquera en
el carril en sentido La Coruña, pero en dirección a Santander, y dieron
aviso a la Guardia Civil de Tráfico.
Al llegar a una de las salidas de San Vicente de la
Barquera fue cuando uno de los vehículos sufrió un accidente al intentar
esquivarlo. Varias patrullas se apostaron en distintos puntos de este
tramo de la A-8 para ver si pasaba, y otro vehículo policial tomó la
autovía en dirección a La Coruña por el medio de la calzada ralentizando
el tráfico, con la intención de evitar que pudiera impactar contra
alguno de los coches que iban en sentido correcto.
Pero ni esta patrulla en circulación ni las otras que le
esperaban en varios puntos lo localizaron, así que otro vehículo se
dirigió a la salida de Caviedes, donde finalmente el hombre fue
localizado en el área de servicio. Al parecer, algún conductor con el
que se topó le hizo señas para que se apartase hacia esa zona.
Los agentes procedieron a su detención por un presunto
delito contra la seguridad del tráfico por conducción temeraria. Al
parecer, el hombre, domiciliado en San Román de Cayón, tenía intención
de ir a Cabezón de la Sal y se metió en la autovía en sentido contrario
«por equivocación».
Carné sin restricción
Este episodio sucedió el mismo día en el que, por la
mañana, otro hombre de la misma edad (78 años) fallecía tras empotrar su
coche en el muro de una casa en Villacarriedo. Ambos hombres tenían el
permiso de conducir prorrogado en el año 2011 y con validez hasta el
2016, sin restricción alguna.
Con estos dos casos se reabre el debate sobre la
conveniencia de limitar los carnés a las personas que sufren una merma
en sus capacidades psicofísicas, una modalidad aprobada en el Reglamento
de Conductores del año 2009 pero que aún no es del todo conocida por
sus potenciales usuarios. Se trata de carnés diseñados 'a la carta', con
límites de distancia y horarios, entre otros. El jefe de Tráfico,
Serafín Sánchez, considera que, en los mayores, es «fundamental el papel
de sus familias y de los médicos, que son los que conocen sus
capacidades».
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