Los vecinos de la segunda fase de la urbanización de la Cruz en Casar de Periedo se han quedado sin acceso directo a sus viviendas desde que el pasado martes quedara instalada una barrera a la entrada de dicha urbanización, con el problema añadido de que uno de los vecinos de esta segunda fase sufre una minusvalía en el 75 por ciento de su cuerpo y con la instalación de dicha barrera no puede utilizar el itinerario habitual que recorría (totalmente adaptado para poder desplazarse en silla de ruedas) para entrar a su casa.
Según ha explicado Jesús Fernández, uno de los vecinos afectados de esta segunda urbanización: “desde que el Ayuntamiento en junio del 2009 diera la licencia para poder instalar esta barrera hemos estado luchando para evitarlo porque veíamos que no íbamos a poder pasar por la calle que siempre hemos utilizado para entrar en nuestras viviendas”. Por eso a lo largo de este último año los habitantes de esta segunda fase, que consta de cuatro casas, han estado enviando escritos a la Consejería de Obras Públicas y Viviendas, al igual que a la concejalía de Servicio Sociales y Urbanismo de Cabezón de la Sal, “habiendo obtenido como única respuesta por parte del Ayuntamiento de Cabezón de la Sal que no procede paralizar las obras”, asegura Jesús Fernández. Por todo ello los inquilinos de las viviendas afectadas presentarán una demanda ante el juez para intentar de esta manera que se les habilite una paso.
Por su parte la alcaldesa de Cabezón de la Sal, Maria Isabel Fernández entiende que “el problema está en que existen dos urbanizaciones distintas con un acceso único” y afirma que “en este tipo de casos el Ayuntamiento no puede hacer nada y es la comunidad de propietarios de ambas partes los que tiene que solucionar el asunto al tratarse de una propiedad privada”. Como solución el Equipo de Gobierno ha propuesto “recibir el vial para hacerlo público” para de esta manera poder actuar en consecuencia.
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