Juan José Cobo (Movistar) afronta su tercer Tour de
Francia observado por el título de vigente vencedor de la Vuelta a
España y con la misión de «ayudar a Alejandro Valverde a alcanzar un
puesto en el podio», en una carrera, que según el ciclista cántabro
«asusta por todo lo que mueve». Es su primera 'grande' tras su victoria
en la ronda española y su primer gran objetivo desde entonces. El
cántabro sabe que en el Tour todo es distinto.
El 'Bisonte de la Pesa', de 31 años, llega con pocos días
de competición, sin victorias, pero afilado en el físico, «en buen
momento» y con perspectivas de ir mejorando con el paso de las etapas.
Hasta ahora, el año ha sido discreto, pero los ojos del ciclista
cántabro estaban puestos en la 'Grand boucle' desde que empezó la
campaña. Su primera sensación después de su última participación en 2008
es de algo más que respeto por la carrera francesa. «El Tour asusta por
todo lo que mueve, todo se hace a una escala muy superior a otras
carreras, hay más nervios. Luego una vez que empiezas lo ves diferente,
pesa menos. Conmigo observo que al llegar como vencedor de la Vuelta se
fijan más y te ven como favorito», comentó.
Cobo se ha marcado como objetivo personal la Vuelta a
España, y tiene claro su papel dentro del Movistar, equipo que llega con
la tranquilidad de haber obtenido ya 22 victorias. «El objetivo es
ayudar al jefe de filas, Alejandro Valverde, y que él pueda alcanzar el
podio. De momento no tengo ningún otro tipo de responsabilidad»,
aseguró. El murciano es la gran esperanza española, junto con Samuel
Sánchez, ante la ausencia de Contador.
No obstante, el recuerdo de la Vuelta, cuando saltó del
papel de gregario al de líder, con éxito final, obliga a Cobo , así como
a su director, Eusebio Unzué, a pensar en la posibilidad de tomar el
mando del equipo si se dieran las circunstancias.
«Vengo con la idea de ayudar en todo momento a Valverde,
pero si las circunstancias de carrera me ponen delante estoy preparado
para asumir el liderato del Movistar, comentó.
El recorrido no es el más favorable para los intereses del Movistar, pero Cobo apuntó a otras posibilidades.
«El problema del recorrido de este año es el exceso de
contrarreloj. Cien kilómetros son muchos para Alejandro y para mí, pero
tampoco olvidemos que hay etapas de montaña en las que se puede atacar
de lejos», concluyó. El de Cabezón de la Sal busca la sorpresa.
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