Cabezón plantará en el Poblado Cántabro huertos ecológicos

 

El Poblado Cántabro de Cabezón de la Sal será la nueva sede de la agricultura en el municipio. El próximo proyecto que el Ayuntamiento tiene previsto llevar a cabo en el recurso turístico más importante de la localidad está relacionado con la plantación de huertos ecológicos a la derecha de la finca del Poblado Cántabro, una zona orientada al sur que daría buenos resultados. El concejal de Servicios, José Luis González Conchas, planteó esta propuesta con miras a que sean los propios vecinos quienes gestionen estos huertos.

 

 «Realizaremos un sondeo entre los vecinos para que los que estén interesados se ocupen de mantenerlos, para lo cual se establecerán unas bases», explicó el concejal. Una idea nueva que dotará de mayor atractivo al Poblado Cántabro. «Se trata de una zona sobrante del recito», la que se encuentra a la derecha de la entrada que vas bordeando cuando accedes a la entrada del Poblado. 

 

«Consideramos que, dado el lugar donde se quiere establecer, sería muy compatible con el entorno», opinó Conchas, quien añadió que «esta iniciativa ya se da en otros ayuntamientos y está teniendo muy buenos resultados». 

 

El proyecto serviría además de «entretenimiento para las personas del municipio y supondría una ayuda social para ahorrar en la cesta de la compra». La superficie donde serán ubicados los huertos permitirá plantar en torno a veinte huertos. El concejal destacó también la importancia de esta plantación «para que los visitantes vean los huertos mientras acceden al Poblado».

 

2.000 visitas

 

La iniciativa dotará aún de mayor protagonismo al recurso turístico que más visitantes atrae en la localidad y que hasta el pasado mes de julio había recibido 2.000 visitas. «Este año llegaremos a 10.000», aseguraba el concejal de Turismo, Gustavo González Monterrubio, este verano. 

 

Aunque este mes ya no hay tanta afluencia de visitantes, continúa llegando gente a visitar el Poblado Cántabro, «que representa cómo vivían nuestros antepasados hace 2.600 años». El recorrido, que implica visitar las cabañas donde habitaban los cántabros en los poblados protegidos por murallas, contará dentro de poco con el complemento de huertos ecológicos que serán mantenidos por los propios vecinos.