El consejero de Medio Ambiente, Francisco Martín, ha inaugurado esta mañana la instalación del depósito de almacenamiento y suministro de gas licuado (GLP) en la gasolinera ‘Virgen de la Peña’ de Cabrojo, en Cabezón de la Sal.
Medio Ambiente ha destinado una subvención de 4.000 euros a este proyecto, que se enmarca dentro del programa para cofinanciar la instalación de surtidores de gas licuado y de solución acuosa de urea en Cantabria, y del que se han beneficiado diez estaciones de servicio de la Comunidad.
La resolución de las subvenciones asignó 37.500 euros para este año dentro de una iniciativa de mayor alcance, adscrita a la Estrategia de Acción Contra el Cambio Climático de Cantabria (EACC). En conjunto, el proyecto de la gasolinera Virgen de la Peña ha supuesto una inversión de la empresa de 74.597 euros.
Las ayudas de la Consejería de Medio Ambiente siguen la línea de trabajo establecida por la EACC, que, entre otros ámbitos, fomenta la movilidad sostenible en Cantabria con subvenciones para la adquisición de nuevos vehículos alimentados por gas natural o gas licuado destinados al servicio de auto-taxi; impulsa el uso del trasporte colectivo y de los medios eléctricos, y apoya la creación de carriles bici.
Ecológico y económico
Con la utilización de GLP se reducen las emisiones de partículas y óxidos de nitrógeno (NOx) en más de un 85 por ciento, disminuyen las emisiones de CO2 (principal gas de efecto invernadero) y se generan menores niveles de emisión sonora y vibraciones que con los motores diesel convencionales. También destaca entre las ventajas de su uso la seguridad del abastecimiento energético y el ahorro económico, calculado entre 15 y 25 euros por cada 1.000 kilómetros recorridos, a los que hay que añadir una mayor duración y menores costes de mantenimiento de los vehículos adaptados a su uso.
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