Ante la surrealista explicación oficial del concejal de gestión y de
servicios sociales del Ayuntamiento de Cabezón de la Sal sobre los
sistemas de depuración en el Polígono de Navas donde dice “estar cansado
de la persecución que realizan algunos miembros de Ecologistas de
Acción con Emilio Carrera al frente”, los perseguidores han replicado
que, “como mínimo, ya estamos empatados en cansancio ante la absoluta
falta de sensibilidad ambiental de una gestión municipal –con Jose Luis
González Conchas al frente– que, como en muchos otras ocasiones,
desvirtúa o diluye los hechos y sus responsabiidades: En este caso
frente a las reclamaciones de los vecinos y testigos de lo que pasa en
la atmósfera y el agua en torno a Navas donde se han producido, también,
emisiones y vertidos nocturnos, extemporáneos o en fines de semana,
dentro del despilfarro e imprevisión en la gestión ambiental del
Polígono”.
Por todo ello, Ecologistas en Acción ha sugerido a esta agotada víctima de tanta persecución, un esfuerzo final –pero no superior al que exige el Libro Gordo de Petete– en distinguir los colectores de aguas residuales (o fecales), los de residuos industriales, y los de aguas pluviales, tres redes y vertidos bien diferentes que no deberían, en ningún caso, entremezclarse. Con el agravante, no ya del pésimo funcionamiento de la planta depuradora del Polígono –un Polígono, recalcamos, industrial y no residencial donde sí se producen aguas residuales–, sino de su completa inutilización –¿quiénes midieron la rentabilidad de la inversión pública frente a la inutilidad de su construcción?–, para acabar llevando los residuos industriales de Navas, de composición y naturaleza que requieren tratamientos diferenciados, a la depuradora de aguas fecales (o residuales), técnica absolutamente prohibida en cualquier manual al uso y que acabará pulverizando los mecanismos de la planta de Casar de Periedo donde, además de no poder, definitivamente, reutilizarse las aguas, deberían analizarse con más cuidado antes de volver a verterlas al río Saja.
Por último, los ecologistas solicitan que el concejal depure sus atrevidos lenguajes y alusiones y se dedique a resolver el despilfarro económico y las chapuzas técnicas para neutralizar la contaminación del Polígono de Navas y, de paso, coloque en su página Web municipal –que no del Partido Popular– y otros canales propagandísticos las informaciones que les remitimos en vez de suministrar continuamente mensajes unilaterales, parciales y sectarios, incluidos los que han circulado o han sido eliminados a conveniencia sobre el Plan General de Ordenación Urbana de Cabezón de la Sal.
Por:Emilio Carrera. Miembro de Ecologistas en Acción-Cantabria
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