La socialista Isabel Fernández ha sido nombrada esta mañana alcaldesa del municipio de Cabezón de la Sal gracias a un pacto suscrito entre el PSOE, el PRC e Izquierda Unida, apoyado por el voto que le otorgó en el pleno de investidura la concejala de Cabezón Puede SAL, Blanca Castañeda.
Así, tras dos largas semanas de negociaciones entre las seis fuerzas
con representación política, en las que se ha especulado con todas las
posibilidades, la ya ex alcaldesa popular Esther Merino vuelve a ocupar el sillón de la oposición tras gobernar cuatro años en coalición con el PRC.
El pacto entre estas tres fuerzas, que fue acordado a última hora de anoche, le otorga la Alcaldía
a la socialista durante los próximos dos años de legislatura, tras lo
cual pasará a manos del regionalista Víctor Manuel Reinoso. Un
acuerdo al que parece se ha llegado para poder realizar el pacto entre
las dos fuerzas e Izquierda Unida, que suman un total de seis concejales. La portavoz de Cabezón Puede y los cinco concejales del PP compartirán los sillones de la oposición
con el cabeza de lista de Leales a Cabezón, Jesús Herrera, que
sustituye en el cargo a María Ángeles García, que renunció a ser
concejala para poder seguir desarrollando su labor como funcionaria del
Ayuntamiento.
La votación se produjo según lo esperado, con siete votos a favor de
la socialista, frente a los cinco de Esther Merino y el concejal de
Leales, que se votó a sí mismo. Entre
aplausos y vítores, Merino otorgó el bastón de mando a Isabel
Fernández, que afronta su segunda legislatura como alcaldesa, ya que ya
gobernó en la legislatura 2007-2010 gracias a otro tripartito. En
las que fueron sus primeras palabras como alcaldesa, Fernández explicó
que volver a gobernar “supone un honor, con el compromiso y la
responsabilidad de trabajar por los vecinos del municipio, con diálogo
social y consenso político y la ayuda de todos”.
La alcaldesa aclaró que decidieron intercalar la Alcaldía con el
portavoz regionalista porque “no se podía haber hecho de otra manera
para que fuera algo serio”. Explicó que “somos las dos fuerzas más
representativas, que además tenemos un pacto a nivel regional y hemos
decidido que sería bueno hacerlo de esta manera”. Una opción que les ha
llevado finalmente a un entendimiento al que les ha costado llegar.
Por su parte, el concejal regionalista, Víctor Manuel Reinoso,
explicó que “los vecinos han querido que haya muchos partidos y que haya
consenso entre todos y el primer gesto que hemos llevado a cabo ha sido
el reparto de la Alcaldía”. No opina lo mismo
la ex alcaldesa, que ayer mostró su malestar con la decisión tomada por
el tripartito y lo hizo notar en el discurso de despedida que leyó ante
los ciudadanos. “Lo que ha sucedido no es la voluntad de la
ciudadanía”, expresó. De hecho, añadió, “durante estos quince días de
mercadeo y negociaciones, los vecinos han mostrado su rechazo”, expresó
visiblemente emocionada.
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