Las juntas vecinales acusan a la alcaldesa de Cabezón de abandono

Los presidentes de las juntas vecinales de Bustablado y Duña, Sara Fernández; de Carrejo y Santibáñez, Manuel González; de Casar de Periedo, José Luis Fernández Conchas; y de Vernejo y Ontoria, Óscar López (todos del Partido Popular), se han quejado "del total abandono que existe en nuestros pueblos por parte del equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Cabezón de la Sal (PSOE, PRC e IU)".


Los alcaldes aseguran que, tras un tiempo de margen suficiente para evaluar el trato que les dispensaba la alcaldesa, Isabel Fernández (PSOE), "en su segundo intento por dirigir los designios de nuestros municipios y conscientes del abandono sufrido en la legislatura 2007-2011, hemos estado expectantes". Además, argumentan que "algunos de sus socios de gobierno habitan en nuestros pueblos".

Sin embargo, aseguran que "la pauta se ha repetido y acentuado, con el abandono, la dejadez y la falta de sensibilidad con nuestros vecinos". Los presidentes de las juntas vecinales explican que "no nos sorprende tanto la actitud de Isabel Fernández, que se ha acentuado en ella el sentimiento de enconada enemistad por el simple hecho de no compartir con ella ideario político". Y acusan a la regidora socialista de haberse olvidado "por completo" de que "todos tenemos el mismo objetivo común, que es servir a nuestros vecinos al margen de rencillas políticas".

Entendemos, aseguran, "que dicho sentimiento pueda venir motivado por su anquilosada frustración como candidata a presidir una de nuestras juntas y verse rechazada en más de una ocasión por el sensato criterio de los vecinos". Esto, aseguran, ha sumido a Fernández "en un estado de enquistada revancha, que le va a acompañar hasta el cercano final de su vida política".

Lo que nos sorprende, insisten los presidentes, "es que el veneno de la ingratitud se ha inoculado en sus socios de gobierno, candidatos también algunos a presidentes, que han corrido la misma suerte y que mantienen la misma actitud que la alcaldesa, no sabemos a ciencia cierta si fruto de su propia frustración o de una venerada sumisión". Y acusan a la alcaldesa y a los miembros de la oposición de "habitar en los pueblos, ajenos a la realidad que se vive en los mismos".