Una vez al año, o dos, los pueblos de Cantabria hacen una
regresión y las calles adquieren la sintonía del medievo. Este fin de
semana, los puestos medievales se asentaron en Cabezón de la Sal y los
niños volvieron a ser príncipes y las niñas princesas medievales.
Puestos con todo tipo de productos rodeados de telas de color marrón
ocuparon las calles cercanas al Ayuntamiento de la villa.
Productos típicos de la 'tierruca', una gran variedad de
dulces y figuras de la suerte. Todo lo necesario para un festín del
siglo XIII. A las doce de la mañana de ayer ya había bastante gente y
algunos compraron, al menos eso asegura Rafael tras una mesa donde vende
muchos tipos de gominolas, un paraíso infantil. Rafael dice que, a
pesar del mal tiempo que hizo el sábado, «no se ha dado mal». Pero la
varita mágica de la suerte no les ha tocado a todos. Francisco Javier
tiene un puesto de productos típicos, vende desde jamón hasta bacalao y
es la primera vez que viene al Mercado Medieval de Cabezón: «Con el mal
tiempo no ha venido tanta gente», dice mientras pone cara de haber
vendido más bien poco.
Con o sin ventas, la iniciativa merece la pena. Al menos
eso opinan los vecinos. «Está bien que se hagan este tipo de cosas
aunque sea una vez al año. Además, hay muchas cosas que comprar»,
asegura Mari, a quien los precios no le parecen altos. Miguel Ángel
Pérez tiene un puesto con reproducciones artísticas del románico en el
mercado y considera que «Cabezón de la Sal es un sitio muy especial».
Miguel Ángel asegura además que ha habido «bastante gente».
Además de los puestos, el mercado incluyó zona de
tabernas y talleres, incluso un rincón infantil con juegos para los más
pequeños, que también pudieron disfrutar de algún paseo en pony por el
pueblo. Hubo pasacalles, tiro con arco y un malabarista que inauguró el
programa medieval.
1 Opiniones...Anímate a participar :
pedazo de mercado medieval...... SIETE PUESTOS pues pronto nos empiezan a engañar estos.....en el programa de las fiestas decia que CINCUENTA PUESTOS jajajaajja
Publicar un comentario