Peña Cabarga ya está lista para teñirse de blanco y de
rojo pasión, del rojo líder de la Vuelta a España. Las banderas y
enseñas de Cantabria serán mañana las grandes protagonistas en las
exigentes rampas del macizo, en lo que se presenta como una jornada
histórica para el deporte de la región. A pesar de ser laborable, miles
de ciclistas y aficionados cántabros preparan con mimo una tarde que
promete permanecer imborrable en sus retinas. No envidiará a las
habituales estampas de los grandes puertos pirenaicos y alpinos. Los
amantes de las dos ruedas se las ingeniarán para buscar un buen lugar
desde el que formar un estrecho y cálido pasillo humano, y empujar a
Juanjo Cobo a lo más alto de la subida, a lo más alto del podio de la
ronda española.
La llegada de la serpiente multicolor a la cima está
prevista entre las 17.20 y las 18.00 horas, dependiendo de la velocidad
media a la que se desarrolle la etapa. La salida tendrá lugar a mediodía
desde el establecimiento Bodegas Faustino, en plena Rioja Alavesa. Los
ciclistas entrarán en Cantabria minutos después de las cuatro de la
tarde, vía Espinosa de los Monteros, y por el Portillo de Lunada de
segunda categoría. Descenderán todo el valle del Miera, cruzando San
Roque y Rubalcaba, para llegar a la localidad de Liérganes pasadas de
las cinco de la tarde. En Solares se disputará el segundo y último
sprint intermedio de la jornada, antes de que aparezcan las decisivas
rampas de Peña Cabarga, con una pendiente media del 10% y tramos que
llegan, incluso, al 18%. De hecho, el puerto está catalogado como de
categoría especial.
Arropado por sus paisanos
Ya en la subida esperará la marea roja, ansiosa por
recibir al bisonte. Comenzando por sus propios paisanos. Desde Cabezón
de la Sal se desplazarán muchos familiares, vecinos, así como varios
miembros de la Sociedad Cicloturista y de Mountain Bike Cabezón,
dirigidos por Juan Vega y Jesús Ángel Maestegui 'Chuchi': «Iremos unos
cuantos del club. Subiremos en bicicleta aunque, con toda la gente que
habrá, no se si podremos llegar hasta la meta». Recibir a un cántabro
con la 'Roja' es algo que no ocurre todos los días: «Es una gran
satisfacción para todos los amantes del ciclismo y, sobre todo, para los
que además somos de su pueblo». El apoyo al de La Pesa no escaseará por
parte de los suyos: «Él es que da los pedales pero nosotros le
animaremos desde las cunetas. Es todo lo que podemos hacer para ayudarle
a ganar esta Vuelta y no le fallaremos».
Cobo tampoco echará de menos a sus amigos de Comillas. Su
aliento ya se hizo notar en el infierno del Angliru, el pasado domingo.
Repetirán en Peña Cabarga una veintena de miembros del club ciclista de
la localidad. Ya sea en bicicleta de montaña o de carretera, la idea es
pedalear hasta la mitad de la subida y buscar un emplazamiento en
alguno de los empinados tramos del puerto. Auténticos 'muros',
implacables ante la llegada de los más de 170 supervivientes del
pelotón. «Le apoyaremos a tope», asegura José Antonio Pomar, presidente,
y uno de los muchos aficionados optimistas estos días: «Si no le ocurre
nada raro se va a llevar esta Vuelta. Se lo merece. Se lo merece un
montón».
El equipo Mountain Bike Cabuérniga y Los Pisteros de
Maliaño comparten planes. Más de una treintena de corredores, entre unos
y otros, ya se han citado en Sarón para atacar la cima. El objetivo es
llegar «lo más arriba posible», según cuenta Borja de Cos, presidente de
los cabuérnigos. En plena ascensión coincidirán con los Cicloturistas
Veteranos de Camargo, que inician mañana unas jornadas de intensa
actividad. El próximo viernes comienzan su tradicional travesía del mes
de septiembre, que esta vez les llevará por las provincias de Burgos,
Soria, Guadalajara, Teruel y Valencia, siguiendo los pasos de Rodrigo
Díaz de Vivar. Antes, por supuesto, acompañaran la trazada del 'Cid' de
La Pesa. En Peña Cabarga, y en el resto del recorrido previsto esta
semana por las carreteras de la región.
Escuelas de ciclismo
Las escuelas también estarán presentes. Mañana, y el
jueves, en la etapa -íntegramente cántabra- que arranca en Solares. Los
chavales del Club Ciclista Besaya tienen previsto seguir a los
ciclistas, bocadillo y bolígrafo en mano, hasta la meta de Noja. También
lo harán el medio centenar de pupilos de Cipriano Higuera, presidente
de la Asociación Museo Vicente Trueba, la misma que propuso a Óscar
Freire para el Príncipe de Asturias -repetirán el año que viene-. Los
chicos de Arsan-Astillero, el Club Ciclista Polanco, el del Asón, el
Occidental, el Campurriano... La marea roja empapará las laderas del
macizo, procedente de todos y cada uno de los rincones de la región.
Nadie quiere perderse a Cobo en su día grande. Feroz y renovado, el de
La Pesa promete escribir esta semana, tanta o más historia que el
mismísimo bisonte de Altamira.
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